Si te llega una notificación por demanda debes preparar inmediatamente tu estrategia judicial porque el plazo para responder a la acción es de sólo ocho días. Por ello, la asesoría de un abogado experto será clave para enfrentar el proceso.
Previo a iniciar una demanda, la institución acreedora contacta al deudor para informar de la morosidad e instar al pago de la deuda. Hoy estas comunicaciones están reguladas por la Ley del Consumidor y jamás podrán ser ocasión de hostigamiento o menoscabo para el deudor.
La cobranza judicial se inicia cuando el acreedor interpone en tribunales una demanda en contra del deudor por haber incumplido con sus obligaciones financieras, durante un tiempo determinado. A través de esta acción legal se busca obligar al deudor al pago de la deuda y, en caso que ello no ocurra, proceder al embargo y remate de sus bienes.
Las demandas por deudas se comunican al deudor a través de una notificación, la que es realizada por un receptor judicial, ya sea en forma personal o bien, dejando copias de la demanda en el domicilio.
Todas las personas tienen derecho a defenderse cuando son demandados por un acreedor, por tanto, se sugiere buscar asesoría legal inmediata para ver la mejor alternativa.
Es muy importante hacer valer el derecho de defensa porque presentar excepciones a la demanda puede traer algunos beneficios. El abogado y director Legal de GrupoDefensa.cl, Mario Espinosa, explicó en el programa ADN Te Escucha que “es la única oportunidad para pedir la prescripción, ya que puede que la deuda que te están cobrando esté prescrita. Si no lo haces dentro del plazo, será tarde. En menores plazos, también podrías pedir el abandono del procedimiento".
No existe un tiempo legal establecido, dependerá de cada caso y del acreedor, quien puede interponer una demanda contra el deudor desde que registra el primer atraso en su pago.
Las demandas por deudas son acciones civiles de cobro, por lo que no existe inconveniente en salir del país. Distinto es el caso de estar afecto a una medida como arraigo nacional o internacional, decretado en un juicio penal.
En algunos casos se puede reclamar la prescripción de la deuda y por ende, solicitar la eliminación de los registros de morosidad o DICOM.
Estas empresas de cobranza pueden llamar o visitar al deudor sólo una vez a la semana. Podrán realizar sólo otras dos gestiones remotas semanales, por ejemplo, a través del envío de mails, mensajes de texto o WhatsApp, con al menos dos días de diferencia. Los llamados telefónicos se pueden hacer de lunes a sábado, entre las 08.00 y las 20.00 horas.
Si recibiste una notificación de cobranza judicial, debes actuar rápidamente. Llámanos al 600 5719 300, rellena nuestro formulario, háblanos por WhatsApp o visítanos en cualquiera de nuestras sucursales a lo largo de Chile.
Recuerda: ¡La primera asesoría es sin costo!
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