La consolidación de deudas, también conocida como compra de cartera, es un producto crediticio para refinanciar las deudas de una persona. Se recomienda contratarlo cuando la capacidad de pago se reduce y se corre el riesgo de caer en morosidad, pero todavía se está al día con el pago de las cuotas.
“Es un instrumento similar a un crédito de consumo, con el que un banco compra todas las deudas de una persona. Puede ser para pagar líneas, tarjetas de crédito, créditos de consumo, hipotecarios y cuentas corrientes. Con la consolidación quedaría todo eso pagado y se tendría una nueva y única deuda con otra institución”, explica Ricardo Ibáñez, abogado y socio fundador de defensadeudores.cl.
A diferencia del crédito de consumo, el dinero que presta la institución financiera no es entregado para libre disposición de quien contrata, sino que la compra de cartera tiene como único fin pagar las deudas.
Beneficios de la consolidación de deudas
Lo más importante es que con esta consolidación las personas puedan reordenar su situación económica. Se pasa de tener distintos compromisos financieros, a tener solo uno, que se debería poder pactar en mejores condiciones que los anteriores. Esto quiere decir, por ejemplo, que el pago pueda fijarse a más cuotas a un menor valor.
Esto último, “permitiría tener en una situación económica más holgada y que esté acorde a los ingresos con los que se cuenta para realizar los pagos”, indica Ibáñez.
Reducción de pagos de administración y mantención
Uno de los beneficios más tangibles, porque incluso podría llevar a generar un ahorro a las personas, es que se pasa de pagar mantenciones y costos de administración por distintos créditos, a pagarlos por un solo producto gracias a la consolidación.
Evita caer en la insolvencia
Como se recomienda contratar la consolidación de deudas antes de caer en morosidad, se transforma en un instrumento preventivo que permite adelantarse a una situación de insolvencia o quiebra. Para esto, es importante llevar siempre un registro de las deudas y de los ingresos que se tienen para poder tomar acciones antes de llegar a una situación crítica.
La consolidación de deuda permite terminar con las deudas y evita enfrentar una demanda judicial por incumplimiento.
¿En qué fijarse para contratar la consolidación de deudas?
Para contratar cualquier producto financiero es importante fijarse en que lo esté entregando una entidad regulada por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), porque eso da garantías de formalidad y seguridad al proceso.
Además, “es clave cotizar, porque cada institución tiene la facultad de poner sus propias condiciones y la variación entre los costos finales de los créditos podría ser significativo. Hay que revisar el interés que ofrecen por consolidar las deudas, cuál va a ser el CAE (Carga Anual Equivalente), en cuántas cuotas se puede pactar y tener muy clara cuánto es lo que finalmente se va a terminar pagando”, concluye el abogado experto.