Un crédito automotriz es un préstamo destinado a la compra de un vehículo. Permite financiar parte o la totalidad del valor del auto. Se paga en cuotas, con intereses, a una entidad financiera.
Si no pagas tu crédito automotriz, las entidades financieras pueden demandarte y solicitar el embargo del vehículo, ya que el auto funciona como garantía del préstamo.
Esto, porque el contrato incluye una cláusula prendaria, por lo que, si incumples los pagos, el vehículo puede ser retirado y rematado.
Además, quedarás registrado en DICOM, lo que afectará tu historial crediticio y limitará tu capacidad para solicitar un crédito u otro tipo de financiamiento en el futuro.
El crédito automotriz sin pie permite comprar un auto sin tener que contar con un ahorro previo, lo que lo hace muy atractivo para quienes necesitan movilidad inmediata.
Sin embargo, esta facilidad tiene un costo: las cuotas suelen ser más altas y los intereses mayores. Lo que incrementa el riesgo de no poder cumplir dentro del plazo de pago acordado.
Antes de contratarlo, es fundamental evaluar tu capacidad de pago, considerar tu antigüedad laboral y utilizar un simulador de crédito automotriz para conocer el monto total que terminarás pagando.
Algunas entidades financieras ofrecen crédito automotriz con DICOM, pensado para quienes tienen antecedentes comerciales y necesitan una segunda oportunidad financiera.
Si bien puede parecer una solución rápida, estos créditos tienen tasas de interés elevadas y condiciones más exigentes, lo que puede empeorar tu situación si no planificas bien tus pagos.
Antes de firmar, revisa detenidamente las condiciones del contrato, los intereses y las comisiones, y asegúrate de que las cuotas no comprometan tu presupuesto mensual.
Evalúa todas las opciones de financiamiento antes de tomar una decisión.
Un simulador de crédito automotriz es una herramienta útil para calcular el monto de las cuotas, los intereses y el costo total del crédito antes de contratarlo.
Utilizarlo te permite comparar distintas instituciones financieras, elegir el tipo de crédito o tipo de financiamiento más conveniente y asegurarte de que se adapte a tu capacidad de pago.
De esta manera, evitas sobreendeudarte y reduces las probabilidades de caer en mora o enfrentar una demanda por incumplimiento.
No pagar tu crédito automotriz puede traer consecuencias serias:
Si ya no puedes pagar tu crédito automotriz, no ignores el problema. Existen opciones legales para evitar consecuencias mayores:
Si se te hizo complicado pagar tu crédito automotriz, la Ley 20720 te ofrece la renegociación. Con ella, puedes acordar nuevas condiciones de pago que se adecúen a tu situación financiera actual.
Mientras dure la renegociación, se detienen las demandas y embargos, por lo que puedes conservar tu vehículo si cumples con el nuevo plan.
Si es que estás en una situación de sobreendeudamiento muy elevado, y no puedes pagar tus deudas, puedes optar a una quiebra. Con ella, se extinguirán todas tus deudas, incluido el crédito automotriz.
Es una opción de último recurso y significa el embargo y remate de tus bienes, incluido el vehículo. Esta opción es un último recurso, pensado para comenzar desde cero.
Si ya te demandaron y no quieres perder tu auto, puedes defenderte de la mano de un abogado.
En DefensaDeudores.cl, con más de 25 años de experiencia, revisamos tu caso para detectar errores en la cobranza, cláusulas abusivas o demandas mal notificadas. Nuestro equipo de abogados expertos está listo para apoyarte.
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